Contra los efectos de la contaminación química sobre la diversidad biológica
Al margen de los terribles efectos que la contaminación química está teniendo sobre la salud humana, la contaminación química, de una manera más amplia, es una amenaza de primera magnitud para la integridad de los ecosistemas de la tierra y su diversidad biológica.
La lucha por la conservación de la Naturaleza ha de tener la preocupación por la contaminación química como uno de sus ejes centrales.
De hecho, algunos de los mayores aldabonazos históricos acerca de la gravedad de la crísis ambiental, se debieron, precisamente, al impacto de la polución química. Ejemplo inmejorable de ello es la figura de Rachel Carson y el efecto notable que tuvo la publicación de su libro "Primavera Silenciosa" allá por los años 60 del siglo pasado. Posteriormente, otras obras como "Nuestro Futuro Robado", no hícieron más que contribuir al crecimiento de la misma certeza acerca de la gravedad de los desafíos.
Hoy en día es ingente la literatura científica que asocia los más diversos efectos negativos sobre la salud de los individuos y poblaciones de organismos vivos con la contaminación química.
No obstante, los problemas son muy insuficientente combatidos. De ahí la fuerza de nuestro compromiso por preservar algo de la pureza que nuestro mundo tenía antes de la irrupción de ingentes cantidades de química sintética en las arterias mismas del tejido de la Biosfera.
Se ha planteado un combate entre dos químicas diferentes, la "química de la tecnosfera" y la "química de la Biosfera".
El Fodesam pretende ayudar para que en ése combate desigual, en el que hay comprometidos monumentales intereses económicos aliados con una gran irresponsabilidad e ignorancia, la química de la Biosfera salga lo más incólume posible.
Un mundo mejor es posible. En éso creemos. Creemos en la fuerza de la verdad y de la vida, frente a los meros intereses.
Además, con ello manifestamos ante todo un compromiso para con el bienestar humano. Muchos de los daños sanitarios que hoy se extienden como una plaga entre las personas de algunos lugares del mundo afectados por la polución química, fueron vistos antes en poblaciones de animales salvajes. Sobre ello han alertado numerosos científicos sin que se les haga el caso debido hasta hoy ( ver, por ejemplo:La Declaración de Praga ).
No es más que aquello que dijera el mensaje atribuído al indio Seattle: "lo que le pasa a la Tierra, le pasa también a los hijos de la Tierra".
Las diferentes especies silvestres son , en este tema, centinelas de la propia salud humana.