Frente a cierta tónica general de dar como normal el crecimiento descomunal de las alergias , el asma o las enfermedades autoinmunes, denunciaremos lo escandaloso de la situación.
Porque es escandaloso que se dé por bueno que un porcentaje muy apreciable de la población, por ejemplo, desarrolle procesos alérgicos, contentándose, como siempre, con dedicarse a "tratar" pero muy pocas veces curar realmente a la gente.
Es escandaloso que se sepa el papel muy importante de determinados contaminantes en el auge de las alergias, el asma o las enfermedades auto-inmunes y que no haya campañas de prevención oficiales que alerten de los riesgos.