Uno de los hechos más graves de las enfermedades ambientales deriva de su falta de debido reconocimiento, el cual puede multiplicar extraordinariamente los padecimientos de las personas que las sufren. El siguiente artículo del abogado Ezequiel Alcalde nos muestra una pavorosa situación que es inadmisible que se sostenga por más tiempo en países pretendidamente avanzados como España. Les sugerimos encarecidamente su lectura.