Firmen la petición en favor del reconocimiento de la Sensibilidad Química Múltiple
EL SECTOR ECOLÓGICO Y LA SALUD
CAMPAÑA POR EL RECONOCIMIENTO DE LA
SENSIBILIDAD QUÍMICA MÚLTIPLE
http://peticionpublica.es/PeticaoVer.aspx?pi=vidasana
Además de las muchas personas (particulares y expositores) que han firmado ya, por ejemplo con motivo de Biocultura Valencia y que firmarán en siguientes ediciones de la Feria (como en Biocultura Barcelona en mayo 2011 http://www.elmercadoecologico.com/revista/2011/marzo/salud/SQM-alimentacion-Bio-agroindustria.asp), se ha habilitado también este instrumento para recoger firmas por internet.
No olviden que, además de las firmas individuales, son importantes también las firmas de entidades, grupos, empresas, asociaciones,... o cualquier otro colectivo, como tales.
UN HECHO IMPORTANTE, NO SOLO PARA LA
SENSIBILIDAD QUÍMICA MÚLTIPLE
Una de las cosas más importantes de las acaecidas en la última edición de Biocultura Valencia 4-6 marzo de 2011 y que se verá también en la edición de Barcelona, ha sido precisamente la escenificación de un hecho clave: que la salud es un eje motor de toda la actividad del sector ecológico.
Ello se ha concretado en el apoyo que la Asociación Vida Sana, con la colaboración de Fodesam, ha dado a las personas afectadas por una enfermedad que no es una más de las enfermedades ambientales sino una enfermedad clave: la Sensibilidad Química Múltiple que cada vez afecta a más personas en España.
A propuesta del Fodesam , la Asociación que organiza Biocultura, la feria más importante del sector en España y que lleva ya muchísimos años funcionando, creciendo y creciendo, ha apoyado una campaña para conseguir que el Ministerio de Sanidad reconozca oficialmente lo que ya han reconocido países como Alemania, Austria o Japón.
El acto central fue la presentación del lanzamiento de la campaña en el salón de actos del pabellón 6 de la Feria de Valencia el sábado 5 de marzo. En este acto, bajo el título de “Cercadas por los tóxicos: el sector ecológico en apoyo de las mujeres “burbuja”. Por el reconocimiento de la Sensibilidad Química Múltiple”, se visibilizó algo que desde el Fodesam juzgamos crucial.
De un lado estaban representantes de las personas afectadas por la enfermedad. En primer término, Elvira Llorca, madre de Elvira Roda, acaso la más famosa afectada por la enfermedad, y cuyas aventuras y desventuras (hasta ahora más bien esto último) han llenado páginas de los periódicos y minutos de los telediarios. También representantes de asociaciones como Francisca Gutiérrez Clavero (de Asquifyde) o Isabel Ariño (de la Plataforma Nacional).
De otro lado estaba Joan Picazos, representante de Biocop, una de las empresas más importantes del sector ecológico, especialmente comprometida con la salud, y firmante como otras entidades del mismo, del manifiesto que pide el reconocimiento de la enfermedad.
Y estaba también, obviamente, Ángeles Parra, de la Asociación Vida Sana, promotora de Biocultura y de muchas más iniciativas en favor de la promoción del sector ecológico. Es una persona que nos ha apoyado mucho en los últimos años en Biocultura para hacer que se hable de la SQM y de otras enfermedades ambientales.
También Carlos de Prada, del Fodesam, dedicados como estamos a promover la conciencia de los riesgos sanitarios derivados del actual modelo de producción imperante, especialmente de los derivados de la práctica omnipresencia de componentes tóxicos en los más variados productos.
Así pues, lo que había allí reunido era , por un lado, los que sufrían a causa de algo, y los que evitan ése algo en sus productos , junto a quienes luchamos por visibilizar ésos problemas y ésas soluciones.
Si todo el consumo fuése ecológico no habría tanta gente que padeciése Sensibilidad Química Múltiple. Y no sólo éso, sino que, como mostramos en esta web, es muy probable que bajasen muy notablemente las estadísticas de crecimiento de muchas otras enfermedades, en consonancia con lo que hoy sabe la Ciencia.
Si lo que se vió en Biocultura Valencia, lo viésemos también con otras enfermedades, es probable que los derroteros de una serie de enfermedades en Occidente fuésen muy distintos a los que hoy son.
El día que se reconozca el papel que la producción ecológica , por su papel en la reducción de la carga tóxica de nuestro mundo, tiene en la salud occidental, habrá comenzado una nueva y más saludable era.
Las personas con Sensibilidad Química Múltiple son muy conscientes de lo que tiene que ver la producción ecológica con su salud. Pero, lamentablemente, no puede decirse lo mismo de muchas de las personas que padecen otras enfermedades, a pesar de que en ellas, los tóxicos presentes en el mundo moderno puedan tener un papel semejante al que tienen en la Sensibilidad Química Múltiple.
El día que veamos lo mismo con enfermos de cáncer, enfermedades auto-inmunes, alergias, asma, problemas de fertilidad, endometriosis, Parkinson, enfermedades tiroideas,... será un gran día.
Muchos enfermos de estas otras patologías saben de los vínculos entre lo que padecen y factores ambientales, pero no con la nitidez que los que padecen SQM, a pesar de que los vínculos sean con frecuencia igualmente fuertes.
Ése día que veamos la misma claridad en la identificación de los agentes causales, las personas que padecen por estas cosas se habrán aliado con algo que tiene que ver mucho con la prevención de una buena parte de sus males y no con quienes hacen negocio a costa tan solo de tratar sus síntomas, mientras el número de enfermos crónicos crece tanto en nuestras sociedades que ya se está amenazando la propia continuidad del sistema de atención sanitaria, dados los costes económicos desorbitados de todo ello, y dejando a un lado el brutal coste humano.
El día que los enfermos de muchas patologías, no se alíen solo con quienes viven de tratarlos y frecuentemente no curarlos sino solo cronificar sus males, sino que se alíen con quienes viven de prevenir sus males, será sin duda un gran día.
Por ello es tan importante lo que se ha dado en Biocultura Valencia, con una enfermedad tan “didáctica” , tan esclarecedora de toda esta cuestión, como es la SQM.
Es muy diferente un sector que vive de crear salud que un sector que vive de los enfermos. Lamentablemente, en nuestra sociedad buena parte de los enfermos se arrojan en las manos de un sector cuyo negocio comienza cuando comienza la enfermedad. Un sector cuyas estadísticas crecen a la par que crece el número de personas que enferman (sus "clientes") y que bajarían si bajase éste número.
Muy diferente es lo que se vio en Biocultura. En Biocultura, entre otras cosas, se vio cumplida ésa máxima de que “más vale prevenir que curar”.
Hoy en día parece difícil que mucha gente se percate de la trampa en la que se está. Mucha gente cree que todo es cosa de que uno enferma, sin saber por qué, y sin que pueda actuarse sobre las causas que precipitan en desarrollo de una patología, y que lo más que puede hacer es esperar a que le den un tratamiento , normalmente farmacológico, o que le operen. Y con frecuencia resignarse a ser un enfermo crónico por el resto de la vida, condenado a una medicación sintomática que no podrá dejar.
Pero tenemos la obligación moral de seguir incidiendo en que lo primero es prevenir. Y en ésa prevención el sector ecológico, que trabaja para que sus productos no porten residuos de pesticidas y otros tóxicos, es absolutamente esencial.
Que lo visto en Biocultura con la Sensibilidad Química Múltiple, consigamos lograrlo con otras patologías.
Y , por favor, no olviden firmar la campaña en pro del reconocimiento de la Sensibilidad Química Múltiple. Es mucho lo que está en juego. Puede ser un primer paso en algo que vaya más allá de las personas que sufren esta patología y que puede extenderse a otras muchas.